El tribunal penal de París condenó, el viernes 16 de febrero, a penas de prisión, que deberán cumplir bajo un brazalete electrónico, los dos protagonistas del “Grupo AZF”que había amenazado hace veinte años con detonar bombas en las vías de la red SNCF.
Michel D., 76 años, empresario jubilado, fue condenado a cinco años de prisión, cuatro de ellos. Su cómplice, Perrine R., de 61 años, una de sus ex empleadas, a tres años de prisión, incluidas dos penas de prisión.
Los dos acusados abandonaron la sala sin decir palabra. El tribunal siguió al pie de la letra las requisas de la fiscalía, que había solicitado pena de prisión para ellos.
Apelación de condena
El tribunal recibió también la constitución de parte civil por parte de la SNCF y condenó a Michel D. y Perrine R. a pagar a la compañía ferroviaria 5,8 millones de euros por los daños materiales sufridos, y un euro simbólico por los daños morales. Los abogados de los dos acusados anunciaron que apelarían la condena por motivos civiles.
Michel D. y Perrine R. fueron juzgados por “asociación delictiva” y “fabricación y posesión no autorizadas de artefactos explosivos”. El tribunal liberó a Perrine R. en relación con la fabricación de explosivos.